Cuando mi hijo mayor era bebé, descubrí por primera vez las lentejas rojas, una delicia de ingrediente mucho más fácil de cocinar y perfecto para los niños pequeños pues se digieren de forma más fácil que las lentejas normales. Esta sopa me gusta prepararla al momento aunque siempre podéis hacerla con antelación, teniendo en cuenta que espesará bastante. Cuando es el caso, al calentarla, le añado un poco más de caldo y ya.
- 1 cucharada de aceite de coco
- 3 dientes de ajo picados
- 1 cebolla o puerro, solo las partes blancas
- 1 tallo de apio picado
- 1 dado de 2cm de jengibre fresco rallado
- 1 pizca de comino molido
- 1/2 chdta de cúrcuma molida
- sal y pimienta recién molidas
- Una pizca de pimienta de cayena
- 250 g de tomate entero pelado (si es cherry, mejor)
- 1 limón cortado a rodajas
- 300 g de lentejas rojas, dejadas 30 minutos en remojo previamente
- 1,5 lts de caldo de verduras
- Calentamos el aceite de coco en una olla mediana, agregamos la cebolla, el ajo y el jengibre, y salteamos durante unos 5 minutos, sin que se doren demasiado.
- Agregamos una pizca de sal, el comino, la cúrcuma y la pimienta de cayena, y revolvemos durante un minuto más.
- Añadmos los tomates, 2 rodajas o limón y las lentejas. Agregamos el caldo de verduras y revolvemos bien. Tapamos la olla y dejamos hervir a fuego lento durante unos 25 minutos.
- Servimos al momento (preferiblemente). Justo antes de servir añadiremos las acelgas picadas en la olla con el fuego apagado, se cocerán con el mismo calor residual de la sopa. Añadimos el resto de hierbas y servimos en boles con una cucharada de yogur griego.